Cuadro con personas. Técnica: oleo sobre lienzo. Medidas: 40×30. Es el cuadro que me ha acompañado en la cuarentena. Al poco de comenzarle, dados los acontedimientos, me vino la idea del Decamerón. Aquellos jovenes que se unieron en tiempos de la peste a contar sus historias. Según comienza la obra:
Por consiguiente, para que al menos por mi parte se enmiende el pecado de la fortuna […] entiendo contar cien novelas, o fábulas o parábolas o historias, como las queramos llamar,narradas en diez días, como manifiestamente aparecerá, por una honrada compañía de siete mujeresy tres jóvenes, en los pestilentes tiempos de la pasada mortandad, y algunas canciones cantadas asu gusto por las dichas señoras
El cuadro, la foto está tomada en una de esas noches de verano en la que seis personas (3 parejas de la familia) nos sentabamos a la puerta de casa, a contar … Frente a la desazón de las sucesivas prorrogas, los pinceles y la imaginación. Ante el lienzo revivía aquella escena que fue real, cobraban vida los personajes, contaban historias, disfrutaban.
El segundo cuadro, el del paisaje con nieble, mide 20×30, oleo sobre lienzo. Lo acabé a finales de febrero, pocos días antes de la cuarentena, sin imaginar siquiera la que se nos venía encima. Para mí es el invierno, soledad, melancolía, añoranza de un paisaje por el que ha pasado miles de veces. Yo lo titularia «ausencia».
Elige el que quieras, gracias por vuestra paciencia y enseñanzas.